De alguien que escribe, para el que lo quiera leer

Evanecense - My Inmortal

 Han pasado unas horas desde que se acabara, una vez más, el Día de San Valentín. Trending Topic en Twitter, una pequeña muestra de que ha sido el tema del día. En torno a las 00.00 de la madrugada dije que quizás porque este año no lo había celebrado con nadie, lo notaba un tanto descafeinado. Pero a riesgo de equivocarme, hoy me estoy dando cuenta que no ha sido ese el motivo. Lo que más bien siento hoy es que a pesar de la felicidad que nos pueda rodear es inevitable sentir un halo de desesperanza en todos nosotros. Y lo más confuso de todo es sentirme satisfecho por ello. Puesto que en las circunstancias en las que nos encontramos actualmente, ya sea aquí, en España, o bien en Grecia, o en LatinoAmérica, o en África,... o en el lugar del mundo que sea, éste se nos viene encima.

En la Antigua Grecia se decía que el Titán Atlas, tras la Titanomaquia, fue castigado por los Dioses del Olimpo a soportar el peso del cielo en sus hombros. Siento que "los Atlas" de hoy en día están de vacaciones mientras el resto somos aplastados.

Cuando era más pequeño, y empezaba a hacerme mis primeras pajillas, a interesarme por las mujeres, a hablar con mis amigos de "cosas de chicos" y, en definitiva, a empezar a ser un pequeño hombrecito, ya surgía entre los chicos y las chicas ese pequeño conflicto de quiénes somos mejores. Ellas decían: "Sólo saben hablar de fútbol, coches, y mujeres". Nosotros decíamos: "Sólo saben hablar de jilipolleces". Y aunque en resumidas cuentas pudiese ser un pensamiento generalizado que hoy en día se sigue llevando dentro de uno mismo con algunos matices, claro está, algo ha cambiado. Y es a ello a lo que me refiero al decir que estoy satisfecho.

Hoy en día es igual de fácil escucharnos hablar de fútbol, mujeres, jilipolleces,... como de crisis, política, paro, propiedad intelectual-megaupload, etc. Parece que la conciencia social, al final, empieza a existir. Parece que cuando se nos toca a cada uno como individuos, empezamos a movilizarnos. Parece que hasta que no tenemos la enorme polla jodiéndonos el "orto", no nos levantamos. Y sobretodo, parecemos imbéciles al pensar que lo único que podemos hacer es aguantar las vacas flacas hasta que todo se solucione. Pero al menos, todo esto ya está en nuestras vidas, conversaciones, preocupaciones,...

Es evidente para mí pensar que esto no va a servir para nada más que para soltarlo, tirar de la cadena, relajarme, y esperar a volver a llenarme de impotencia. Pero como digo arriba en el título, "para el que lo quiera leer". Más allá de eso, no puedo hacer.

Lo único, insistir en la desesperanza, la preocupación, la impotencia,... en resumidas cuentas, la tristeza, con la que día a día nos levantamos esperando que algo haya cambiado para bien. Y mientras estos "titanes" disfrutan sentados sobre el cielo que a nosotros nos aplasta, intentemos entre todos darles la patada, y encargarnos de sujetarlo nosotros mismos. Que yo pienso que podemos.

Y tanto a los que defienden su postura de pasotismo y cinismo al apoyar lo que nos está ocurriendo, con un simple y estúpido: "Haber votado a los otros. Esto es Democracia" (Me río yo de escucharles después quejarse de la situación actual...); como a los abanderados de la revolución bolchevique salidos de un concierto de Ska-P, sin más fundamentos que el del sueldo del Rey, la franja morada en la bandera, o un perro y una flauta, les digo una cosa: Me dais asco. Simplemente os importa tener razón, sea lo correcto o no para el resto. A unos, su indiferencia. A otros, su soberbia de pensar que ellos son más listos y saben más, sin pararse a escuchar al resto. Me dais ASCO.

(Sonido de cisterna) Me he quedado a gusto.

Hasta otro día.


Pd: Antes de que alguien que pudiera leer esto me dijera que piensa que la mayoría no están realmente concienciados, yo hablo de la gente joven. Los que más o menos conscientes somos de la que nos espera visto lo visto.