Hace ya algo más de una semana que terminó su segunda temporada, con un final bastante descafeinado, todo sea dicho. Las canciones usadas para los campeonatos de coros que estructuran el argumento, han sido denominadas "canciones originales", siendo composiciones echas por el equipo de producción de la serie. Siendo de la Fox, no es extraño que hayan tardado tan poco en comenzar a explotar el producto. Al menos a mí, dichas canciones me hicieron pensar que era un tanteo de cómo acogería el público de la serie, el hecho de que los chicos de Glee comenzaran a sacar discos propios, y no sólo recopilatorios de las interpretaciones de temas famosos.
Ahora, nos llega este álbum, de la mano del actor que ejerce de director del coro New Directions en la serie. Y es que, siguiendo con mi teoría, este disco pertenece más a Will Schuester, que al propio artista que lo encarna. La tónica del disco es precisamente la misma que la de la serie. Sin ir más lejos, la versión de "Over The Rainbow", (titulada con ese "somewhere" delante que muchos creen que es el nombre real del tema) la realiza en colaboración con la actriz Gwyneth Paltrow, artista invitada a la serie en dos episodios de la segunda temporada como la profesora substituta Mrs. Holliday.
El primer single del disco, además del primer corte del mismo, "Summer Rain", es un intento descafeinado de sacar una canción veraniega, aunque no deja de parecer haber sido grabada en un aula del instituto de la serie. De hecho, a mí me da la sensación de que en cualquier momento va a salir cantando parte de una estrofa alguno de los chicos del coro.
Matthew Morrison - Summer Rain
Y reafirmándome otra vez en lo que digo, en mi opinión el disco al completo es un cúmulo de canciones que no llegan a inquietarte lo más mínimo, salvo que seas una loca de la serie, o del actor. Salvo "Don't Stop Dancing", que es algo más movida, o el último corte del disco, "It's Over", la única balada como tal del disco (quizás porque el instrumento que la acompaña es un piano), el resto del disco carece de personalidad alguna.
Lo único salvable son, en mi opinión, y como ya he dicho, las colaboraciones. Los dos mejores cortes del disco son "Let Your Soul Be Your Pilot", y "Mona Lisas And Mad Hatters/Rocket Man", realizadas con Sting y Elthon John, respectivamente. Y porque llevan el sello característico de los dos artistas ya consolidados, los cuales restan protagonismo a Matthew Morrison abrumadoramente. Sin ir más lejos, son dos reinterpretaciones de dos famosos temas de dichos artistas, dando la sensación de que le hacen un favor, de que este disco es un episodio más de Glee, esta vez sólo en audio.
En definitva, mi más sincera enhorabuena al Sr. Morrison por haber cumplido el sueño de un treintañero que jamás encontró su sitio. Para los fans de Glee que no sepan ver una aberración musical hecha para sacar dinero, también. Para el mundo de la música, bueno, no le afectará en lo más mínimo, pero ofende el hecho de que esto vaya a ser un éxito de ventas (para lo que és, dos copias vendidas fuera de la familia de este señor, y de sus amigos, ya será un éxito), mientras que grupos como Arcade Fire, ganador del Grammy 2010 al mejor álbum, por encima de Lady Gaga, por su disco The Suburbs, algo que no deja de ser obvio, pero que a muchos sorprendió, o Muse, candidato al mejor evento de la historia de Wembley Stadium, tanto deportivos como de espectáculos, por su HAARP Tour de 2007, son poco conocidos, por decir algo. (en la votación, se encuentra al lado de Live Aid del '85, Bad Tour de Michael Jackson, el concierto de Queen del '86, el Rolling Stones World Tour ...; y estos sólo entre los eventos no deportivos, aquí tenéis la lista completa).
Pero bueno, esta es mi recomendación de los Lunes, ya que fuera de todo, sigo la serie.
Un saludo.
Pd: Perdón si parecía cabreado, pero estas cosas no me gustan ;-).
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